¡Increíble!: Universidad Colombiana abrirá un curso de cultivo de Marihuana
Entre los aspectos a tratar estará el manejo medicinal y cosmético del cannabis sativa.
La Universidad Nacional de Colombia abrió una convocatoria para un curso de 'Cultivo y aprovechamiento medicinal y cosmético del cannabis', según la página de la Facultad de Ciencias Agrarias de esa casa de estudios.
El curso, que se llevará a cabo en la sede de esta universidad en Bogotá, busca "generar aprendizajes sobre legislación, variedades y manejo básico del cultivo medicinal", recoge la invitación.
En julio de 2006, Colombia reglamentó el uso médico y científico de la marihuana a través de la Ley 1787, sancionada por el presidente Juan Manuel Santos.
El taller de 40 horas de duración está dirigido a personas interesadas en el "manejo agronómico y el procesamiento preindustrial del cultivo de cannabis sativa con fines medicinales".
En la actualidad, se evalúan las principales características y propiedades de las variedades de marihuana más comunes en el país –Corinto, Punto rojo, Mango viche y Santa Marta Golden– mediante un procedimiento que incluye la selección de las plantas, el secado y la separación de sus partes germinales, para luego someterlas a un proceso de extracción de aceite esencial por arrastre por vapor.
El aceite esencial de marihuana tiene una naturaleza oleaginosa con un alto contenido de ácidos grasos que además tiene gran concentración de cannabinoides, cuya presencia es mucho mayor en las inflorescencias –o moños– en sus hojas.
El modelo de investigación y desarrollo para cannabis, que ha venido adelantando el Grupo de Investigación en Sistemas Integrales de Producción Agrícola y Forestal (Sipaf) de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.), tiene un carácter sustentable, participativo y productivo, que integra componentes de inclusión social y diagnóstico con las investigaciones realizadas.
El profesor Jairo Cuervo Andrade, a cargo del Sipaf, explica que “en algunas comunidades se viene trabajando en sistemas caseros de extracción sencilla o Baño maría, pero nosotros estamos interesados en aplicar este método en condiciones de laboratorio que ya hemos aplicado en plantas aromáticas como romero o caléndula”.
Según Johana Niño Avella, coordinadora del Grupo de Investigación y Estudio del Cannabis y otros Enteógenos (Giece), “las inflorescencias del cannabis son ricas en compuestos denominados cannabinoides, tres de los cuales tienen un particular interés por sus propiedades terapéuticas: el tetrahidrocannabinol o THC, el cannabidiol o CBD y el cannabinol o CBN, junto con algunos compuestos intermedios como el ácido cannabigerólico, cannabigerol y ácido cannabidióico”
Existen otros compuestos o terpenos que en general le dan a la planta otras características asociadas a su particular aroma, y aquellos de tipo flavonoides, cuyo comportamiento es de especial interés para la industria cosmética y farmacológica.
Considerada como una de las mejores técnicas para la extracción de aceites esenciales junto con el sistema de extracción de fluidos súper críticos, la extracción de arrastre por vapor ha reportado una eficiencia equivalente a producir 10 mililitros de aceite esencial por cada kilogramo de marihuana empleado, dependiendo de la variedad.
“La planta que vamos a analizar es de la variedad Corinto y ha pasado por un proceso de desarrollo que en promedio dura siete meses para que las inflorescencias puedan ser cosechadas”, explica Gabriel David Beltrán, doctorando en estudios sobre cannabis de la U.N.
Extracción en fase líquida
Una vez efectuado el pesaje de las inflorescencias seleccionadas, equivalente a un total de 150 gramos, los moños son dispuestos en el aparato de extracción de aceite, de modo que tan pronto comience el proceso de ebullición, el vapor pueda extraer los principales contenidos y aceites volátiles de la planta.
Luego, el vapor pasa por un condensador en el que se procede a su enfriamiento, de tal manera que pueda hacerse una extracción del aceite en fase líquida, gracias a la separación del componente de vapor y el aceite de la planta.
Con rendimientos entre 1,0 y 1,4 % en la producción, el aceite obtenido es remitido al Departamento de Farmacia de la Facultad de Química de la U.N., donde se analizan sus distintos compuestos.
El grupo de investigación Sipaf, junto con entidades dirigidas por egresados de la U.N. como la Corporación Coeco Colombia y Giece, hacen parte de la cadena nacional productiva del cannabis medicinal, el cáñamo industrial y la coca ancestral.
La empresa colombiana Cannabis & Coca Medical Scientific SAS tiene como finalidad buscar el bienestar de las comunidades locales productoras, sustitución de uso, aprovechamiento sostenible y protección de los recursos naturales y genéticos del país.